sábado, 5 de febrero de 2011

Las chicas grandes sí lloran


El aroma de tu piel permanece en mi ahora
necesito refugiarme en mi propia protección

para estar conmigo misma en vez que en calamidad.
Paz y serenidad.
Espero que lo sepas
que esto no tiene nada que ver contigo.
Es personal, yo y mi otro yo
tenemos algunas cosas que aclarar.
Es tiempo de ser una chica grande ahora

y las chicas grandes no lloran.

El sendero que camino lo tengo que recorrer sola

debo dejar los pasos de bebe, ya he crecido.
Los cuentos de hadas no siempre tiene finales felices, ¿cierto?
y todo oscurecerá si me quedo.

Puedes tomar mis manos si quieres

Porque quiero tomar las tuyas siempre.
Seremos compañeros y amantes y compartiremos nuestros mundos secretos.

Es díficil quemar etapas. Es difícil entenderme a mi misma si nadie me entiende. Fue difícil quitarme el chaleco. Es difícil darme cuenta, como toda adolescente que cree saberlo todo, que en realidad solo sé que nada sé. Es difícil escuchar a alguien que se toma su tiempo para dirigirse a una adolescente muy terca. No seré perfecta, pero me gustaría que me vea como yo lo veo. Es hora de crecer. No, de crecer, no. De quemar etapas. De madurar antes de lo normal como siempre lo he hecho. No me quejo, en el fondo me lo busqué. Me lo busqué porque así lo quería. Será difícil (ya lo es). Pero me encanta lo difícil, lo fácil me da arcadas. Me gusta lo difícil pero a la vez, intento vivir lo más feliz que puedo. Así la felicidad resulta mas exquisita. Como alguien que trabaja por pasión y convicción, sabiendo que no sera remunerado como merece. Pero al final la pasión se hace mas fuerte. Y lo difícil con él es más que placentero, podría decirse, orgásmico. Pura pasión, por mas cursi que suene. Felicidad (si él me lo permite). Es arte. Y el arte es el sentir de los sentidos. Yo lo siento con mis cinco sentidos. Lo amo. Más que amarlo. Je suis desolé.

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