domingo, 8 de julio de 2012

Soñé con plástico


Miro alrededor, heridas que vienen, sospechas que van, y aquí estoy: pensando en el alma que piensa y por pensar no es alma. Desarma y sangra.
(Desarma y Sangra - Charly García)

Soñé con plástico y el vacío. Soñé con ese jarrón que pensé que ya se me había olvidado. Soñé con la que alguna vez llegué odiar sin conocerla. No sé si debería ser esa persona la víctima de esas punzadas retorcidas dentro de mí, o quizás otra. Al final, ahorita debes estar pintándote las uñas o quizás viendo un programa de televisión banal con dibujos animados. Tú, que quizás ni sabes que escribo, y si es que supieras, ni lo entenderías. 

Tengo ganas de matar a alguno de los dos, o quizás a los dos. Al principio, de haber sido tonta, hubiese creído que tú merecías morir ahogada en mis pensamientos, pero no soy tonta, ya no más; era otra persona quien merecía eso. Y pues tú, tenemos que aceptar que mi inseguridad era injustificada, porque si es que tú ibas por delante de mí, para ESA persona, era porque ESA persona, en realidad, estaba mal de la cabeza.

Luego, tenía que aceptar que esto era una selva. Tan rosa, tan estúpida como esa película que citaron a esa canción ochentera: "el amor es un campo de batalla". A ti te imaginaba viendo eso y yo quedando como estúpida observando un diálogo tan estúpido que ni yo tendría con el chico que intento recuperar. Y me llegaste a parecer tan vacía que ni me preocupé por eso, además, era la primera vez que algo así me sucedía. Pero luego me di cuenta que no solo eras tú, ¿me tenía que limitar escuchando a Amanda Veneno narrando su historia sobre cómo matar a su cónyuge? Porque sabes, no soy tonta. ¿SABEN? No soy tonta. Y una persona, por más caja vacía rosada que fuera, llega hasta donde la otra caja vacía negra, la deja llegar. ¿Dos cajas vacías juntas? Tal para cual, quizás no debí haberme entrometido. En realidad, nunca lo hice. Las cosas pasaron es un orden cronológico casi Hegeliano.

Y yo, ¿qué hago preocupándome por una caja vacía? Si es que ni se da cuenta lo que hace con la otra caja vacía, pues, lo dejo ser, ¿no? Quizás es ese destino que suele ser mencionado en esas canciones cursis y empalagosas que debieron haber escuchado juntos. Tal para cual, nuevamente. Quizás yo me deba estar preocupando por un cofre lleno de objetos mágicos y valiosos. Total la caja vacía es tan vacía que ni siquiera se da cuenta que está con un cofre lleno y por ello prefiere otra caja vacía. ¿Qué hago escribiendo sobre dos cajas vacías?

Y yo, ¿qué hago escribiendo sobre dos cajas vacías? Como he dicho en la mayoría de mis entradas, será penoso leer esto en unos meses o años. En las cajas vacías no hay contenido, estoy tan llena, que yo misma les he puesto un contenido vacío. ¿Por qué una caja vacía me haría daño sin saberlo? Porque esta vacía. Entonces, nuevamente la pregunta ... ¿qué es mejor ¿Una caja vacía o la caja de Pandora que desata todos los males del mundo? ¿Es, acaso, el mismo daño? ¿Y los rezagos? Tan solo, léeme.

Será un tropezón, pero estuvo en mi subconsciente, ni siquiera en el consciente. Detesto que por tu culpa, seas quien seas, tenga que despertarme algunos días con un sabor amargo en la boca. Y no, no es la flema de mi gripe de estos días.  Detesto que por tu culpa no sé si estoy dormida o despierta. Detesto que por tu culpa mis sueños no estén en mis sueños.

Nunca tan explicita, pero de mis errores aprendo. Nunca se queden calladas. Nunca se amarren las manos. Nunca. Todo es por algo. Todo lo que sientes es por algo. No dudes de ti misma, total Descartes nos enseñó que en lo único que podemos creer, es que existimos ... porque pensamos. Si es que aplico esa ley entonces, tendré en claro, que las cajas vacías ya no existen en mi mundo.

1 comentario:

  1. quien es ese cabeza hueca que esta desperdiciando un tesoro como tu, lola? y por otra cabeza hueca? entiendo bien tu metafora?

    loliiiitaaa, loliiiita, aaay lolitaaaa, suelo cantar en las noches cuando te leo y me derrito. quiero tomarme un cafe contigoooo!!!

    ResponderEliminar